Senderismo en el P.N. Sierra de Hornachuelos

El pasado 25 de abril salí con una excursión, organizada por “El Enjambre”, de 50 personas para hacer senderismo por el P. N. Sierra de Hornachuelos. El día amaneció gris y con llovizna pero con una agradable temperatura.
Sobre las 9.30h visitamos el centro de visitantes “Huerta del Rey” que está a escasos 50 m de un restaurante donde desayunamos.
En el centro de visitantes pudimos observar mediante maquetas, fotografías y videos virtuales la flora, fauna y demás particularidades del Parque Natural Sierra de Hornachuelos y de Sierra Morena en general. La gran mayoría de las distintas rutas que se pueden hacer por el parque salen del centro de visitantes.

Comenzamos por el Sendero de las Herrerías que llega al área recreativa Fuente del Valle que precisamente es donde ese mismo día se celebraba la romería del patrón de Hornachuelos, San Abundio. Durante este recorrido caminábamos prácticamente por caminos de la dehesa predominando las encinas y los alcornoques (con los troncos pelados) y el matorral mediterráneo. Junto a los caminos pudimos observar tres antiguas caleras, ya en desuso.

Calera sendero junto al cauce

Después de andar unos 3 km y habiéndonos dejado las nubes y empezando a hacer acto de presencia el sol, nos abandonaron una parte de la excursión, los de mayor edad ya que la guía que llevábamos nos advirtió que debido a las últimas lluvias tendríamos que cruzar el cauce del río Guadalora varias veces, teniendo que descalzarnos y cruzar por el agua para poder proseguir.
Así que unos 15/20 completaron el Sendero de las Herrerías con sentido circular hasta el centro de visitante (4.5 km aprox. en total).

El resto continuamos por el inicio del Sendero del Guadalora por caminos prácticamente llanos hasta que llegamos a la Fuente del Conejo, donde descansamos junto a una pequeña laguna y refrescarnos con agua fresca de un manantial. A partir de esta zona y con un poco de suerte podremos observar el vuelo de rapaces como el halcón peregrino, el águila perdicera o el águila real o el buitre más grande de España: el buitre negro, yo no vi ninguna.
Poco a poco nos vamos adentrando en el bosque mediterráneo y tras una fuerte bajada en zigzag durante unos 800 m (con pendiente media del 10 %) podemos observar toda la grandiosidad del valle del río Guadalora que nos espera al fondo arropado con una frondosidad del bosque de ribera que lo circunda. En la bajada pasamos junto al Molino de las Palomas, una antigua construcción que utilizaba el torrente del cercano río Guadalora para moler el trigo cultivado en la meseta. A partir de aquí no dejamos de oír la corriente del agua que nos guía siguiéndola hasta el mismo curso del río.

bosque mediterráneo

La ribera del río es muy frondosa con mucho arbustos, almeces centenarios, sauces dejándonos simplemente un estrecho sendero para poder continuar que se entrecruza con el cauce del río que para pasarlo nos tuvimos que descalzar y andar sobre el lecho de piedras con un agua que nos llegaba casi hasta las rodillas, ...así en tres ocasiones más. De ahí algunas pequeñas caídas y pantalones mojados que más que entorpecer el paso, lo refrescaban, ya que el día despejado y el calor ya nos acompañaban.

1ª cruzada del Guadalora

Seguro que en otra época del año y en otro año no tan lluvioso habrá zonas que no lleve agua, ya que el río se va alimentando a su vez por manantiales que brontan en el mismo cauce. Así que se podrá cruzar por las piedras perfectamente o por el mismo lecho seco.

sendero junto al río

rápidos del río

A la sombra de las encinas, a veces, pudimos ver las “hozadas” de los jabalíes que han removido la tierra con sus hocicos en busca de frutos y raíces.

meandro del río

En la última parte del recorrido el río forma una pequeña poza de 2.5 m de profunidad cerca del lugar conocido como Pasada de las Algeciras, donde finaliza el itinerario con el cruce de la carretera junto al Puente de Esira.

Pasada de las Algeciras

A partir de aquí también se puede continuar hasta el centro de visitantes por el sendero del Águila, pero éste lo dejamos para una próxima vez.
Después de casi 4 horas y 9.5 km de caminata nos subimos al autocar para el almuerzo en Hornachuelos. Yo, sino fuera por las numerosas veces que tuvimos que cruzar el cauce calificaría de dificultad baja ya que se hace bastante bien. Supongo que por esta razón lo definen de dificultad media.
Aclarar que para hacer el sendero del Guadalora es necesario autorización de la Delegación de Medio Ambiente y aconsejo debido a las aclaraciones y a la ayuda que se contrate un guía para el recorrido.

Un saludo.