viernes, 9 de diciembre de 2011

ESCOCIA día 1 -miércoles: EDIMBURGO

A las 5 de la tarde hora inglesa estábamos sobrevolando y viendo una impresionante panorámica desde las alturas de Edimburgo, antes de llegar al aeropuerto, con sus siete colinas (al igual que Roma, Estambul o Lisboa) en la que una de ellas y quizás la más impresionante, que no la más grande, la del Castillo, es de origen volcánico. Completa la vista el Firth of Forth (Estuario del rio Forth) bordeando media ciudad con su peculiar puente metálico Forth Railway Bridge al fondo. Primer momento para recordar.

Con el sol cordobés azotándonos a unos 40º C pasamos en algo más de tres horas a un radical cambio de temperatura con un cielo vespertino casi despejado donde la manga corta que llevábamos parecía más corta que de costumbre.

El cielo azul escocés poblado por algunas nubes blancas haciendo caso a su merecida fama terció en pocos minutos en una capota gris oscura del que colgaban cortinas de agua que nos dieron una bienvenida tan típica como incómoda a la capital escocesa. Ya estábamos en Edimburgo, la primera parada de nuestro viaje. El primer paseo por la ciudad empedrada fue con maletas, chaquetones, charcos, cada vez más charcos e ilusiones, muchas ilusiones camino de nuestra primera compra: dos paraguas ya que se nos había olvidado echar ese elemento tan imprescindible por estas latitudes. Luego nos dirigimos hasta nuestro Bed & Breakfast: Sandilands Guest House (http://www.sandilandshouse.co.uk/).

Haciendo caso omiso al cansancio nos fuimos a la primera toma de contacto con la ciudad. Para llegar a Princess Street (una de las calles principales de la ciudad junto a la Royal Mile en la Old Town) atravesamos la New Town, zona de calles cuadriculadas con arquitectura típica escocesa. Desde Princess Street, todavía no se puede uno imaginar la grandísima belleza de la ciudad pero te va dando pistas con la fantástica vista del Edinburgh Castle al fondo, en lo alto de la imponente mole de piedra.

Castle Edinburgh desde Princess Street

Nuestro primer destino: la Old Town, subiendo una empinada pendiente después de cruzar Princess Street Garden, que hacen de frontera verde entre la nueva y vieja ciudad. La arteria principal de la Old Town y quizás de toda la ciudad es la Royal Mile (Milla Real) que va desde la explanada del castillo hasta el Palacio de Holyrood, residencia oficial de la Reina de Inglaterra en sus visitas a Edimburgo.

En esta calle es donde pudimos comprobar el ambiente de la ciudad en agosto donde se celebra el “Fringe”. Este festival es el que se celebra en la calle donde la música, el teatro, los mimos, los malabares, los performances, y demás artistas callejeros se mezclan en una amalgama de estilos durante toda la milla real que sorprendentemente nos encontramos abarrotada de todo tipo de gente. Decir que sólo el programa oficial de este festival, que es sólo uno de los que se integran en el “Festival Internacional de Edimburgo” que se celebra en verano en Edimburgo, junto al “Festival cinematográfico de Edimburgo”, el “Festival Internacional del Libro de Edimburgo”, el “Festival de Jazz y Blues”, supera las 400 páginas, así que imaginar la cantidad de actuaciones y artistas que se expresan cada día en esta ciudad, unos, …todo sea dicho, con mayor acierto que otros.



Como el agotamiento ya hacía mella en nuestros cuerpos, que no en nuestro ánimo, decidimos irnos a dormir ya que nos quedaban por delante 10 días muy intensos para recorrer casi toda escocia, pero no antes de tomarnos las primeras pintas de la cerveza mas conocida de Escocia, Tennent`s en uno de los pubs mas conocidos de Edimburgo y de los más antiguos, el "Deacon Brodie's Tavern" en la misma Royal Mile.


Este pub lleva el nombre de William Brodie, del que se dice que tenía una doble vida: un hombre respetado por el día y líder de una banda de ladrones por la noche. Una turbulenta historia en la que se inspiró el escritor local Robert Louis Stevenson para crear al doctor Jekill y mister Hyde.

2 comentarios:

  1. Pedrito estoy enganchada a tu blog!!

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  2. Me alegra mucho saber que te gusta. Proximamente... más!
    Un saludo!

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